
Una de las prioridades de la agenda mundial sobre discapacidad es promover el liderazgo y la participación activa de las personas con discapacidad. En las últimas décadas, estas personas y las organizaciones que los representan han impulsado cambios clave en sus comunidades, han llevado a cabo iniciativas que no solo promueven sus derechos y bienestar, sino que también fomentan el desarrollo inclusivo. Esto incluye garantizar el acceso universal a servicios básicos mediante enfoques específicos y transversales, a través de actividades como consultas, recopilación y análisis de datos, así como apoyo a los esfuerzos de promoción y rendición de cuentas.